“29 POEMAS
DE UN NOVIEMBRE QUE SE ROMPIÒ”
1
Del cabello roto,
de su imagen: olvido.
Ella ve de rojo,
yo de morado.
Estamos odiando el siglo,
con su peluca y su mentir sin rasurar.
En el centro de la rabia más nerviosa, estamos todos.
Ella ve de rojo, yo de morado,
ella y su cabello roto
caracoles en la madrugada.
Ella y su gato,
ella y su cabello roto,
ella volviendo por la luz
y su cabeza girando después del atropello…
2
Llorando estrellas
su cabello roto,
su canción risueña.
3
Sus pupilas
ejercen
la fuerza del sol.
Estar perdido, estar soñando
con el unicornio que lleva en el dedo.
4
La noche alarmada
El tiempo esculpe su tragedia
Dios nos ama
El mar: mi obsesión
con ella en la boca.
5
Su familiaridad con la noche
Su ruido de cabeza
Su frente con flores
Su unicornio
Su voz enredada en el humo
Cigarrillo y canciones
vestida de nubes
con el último respirar del fuego.
6
El estallido del color en la esfera de tus ojos,
donde me reflejo, con el mar en las manos.
7
Cielo de vidrio,
duraznos en la boca,
silencio: ¡que suene el estallido de nuestro
cuerpo, en el bendito amor!
8
Viajé por el ritmo del pensamiento,
ella vuelve calor
el paisaje, resolviendo
la herida: Un beso de sus dedos.
9
Habla y fuma,
sonríe y llueve,
su boca, fiel constelación
vértigo, vértigo, vértigo…
10
No me sabe decir amor:
lo vive, lo huele, lo piensa,
lo atropella, sexo en su mirar.
11
Su mundo: violencia,
su teatro, su ropa,
son símbolos del siglo agonizante,
yo: su vacío.
12
Si, me viajo en sus pupilas,
en sus pestañas,
en la ruina de
su falla mental.
13
Sus guantes
Sus abrigos
Sus despedidas
Sus abatares
Sus hilos mentales
son el puente al vacío,
ciudad, ciudad, ciudad, noche, noche, noche…
14
Sus guantes tienen prisa de mi piel,
di la espalda besando su rostro en una noche de jazz.
15
Te observo y disparas
una flor creciendo en el asesinato.
16
Rompió su cabello
con el silencio,
su respira
contra el mar.
17
Mental, metal, su voz: emergencia,
se cae el cielo, el agua repta por sus brazos
silencio, el agonizar en la flor
de Noviembre, el estallido en Diciembre,
el ojo de su enfermedad me vuelve piedra,
sus reptiles, sus pensamientos,
su sistema solar, sin poesía.
El mundo de rodillas espanta,
cúrate que su cabellera cobra vida:
cuando miente, cuando vomita estelas de venas
sin latir, enferma, enferma.
Sus edificios en mi día
de manos cruzadas, de mi ignorante corazón.
Somos hijos de la nube, de Electra, de Edipo.
De noche es virgen automática,
de sirenas en las uñas y abejas en los huesos.
Ella tiembla por él, ella taladra los muros en una lluviosa
noche.
Un huerto de culebras en su almohada.
Y desea un hermano en su cama,
con saliva en los dedos
y se da vuelta el mar
donde un vehículo arrolla el color de sus pupilas.
18
Camina mujer, que dios –espectador de tu traición diseñada en una PC-,
convertirá en sal los versos.
19
Te volviste rojo,
yo soy arco iris
mental de
tu pena.
20
El vacío y débil:
yo.
Tú: la ruina de ti misma.
21
Come mariposas
su revólver estalla:
¡corazón!.
22
La mirada en el aire,
niña frágil, de nadie,
eres mía de noche
niña de origen agua,
los astros en tu cabello
el sabor de tus dedos
cuando mi boca juega con tus uñas en un café.
Los espejos erizan sus pupilas
cuando los tocan tus pestañas,
parpadea el sol,
de mi mente: no sabes nada,
solo el mensaje eléctrico de decir: “Te amo”
aunque seas muralla.
23
Mi memoria se hunde en el bao
de tus besos,
soy tan absurdo, que sonrío en tus rodillas.
24
No hay hoteles, ni sexo.
El placer de tu rostro
en mis planetas deshabitados.
25
Mejor un pastel:
No un verso
No un vaso
No un temblor
No un cielo
No un tambor
No mi trompeta
No tus manos en mi rostro.
26
Ella: Sueño
Ella: Barco
Ella: Un día
Ella: Un romper de olas.
Un ojo
Un revólver
vértigo, giro, giro, giro, caigo, caigo…
27
Para tu pasión: Un revolver
Para tus besos: Yo
Para no volver: El jazz
Mi trompeta te besa…
28
Si huyes, el mar volverá
con el cabello rojo,
y colgará su pasión en tus piernas.
29
Llegó con sus balas,
habló de la noche
y besamos el amanecer.